Detalle de la Obra:
El cuadro estuvo atribuido a Veronés, pues porta una firma apócrifa de éste que además lo fecha en 1553. Supuestamente adquirido por Velázquez durante su segundo viaje a Italia, formó parte de la decoración del Salón de los Espejos del Alcázar de Madrid, figurando en los inventarios de 1686 y 1701. El incendio de 1734 dañó bastante la pintura hasta el punto de tener que ser recortada, pasando de los aprox. 250x330 cm aprox. originales a los actuales 219x270 cm. Durante el siglo XVIII decoró el Palacio Real Nuevo hasta su traslado al Prado.