Detalle de la Obra:
Figura por primera vez en las colecciones reales españolas en el inventario del Alcázar de Madrid de 1666 formando pareja con otros tres cuadros (todos ellos perdidos) en la "Escalera secreta de las Bóvedas" del Cuarto Bajo de Verano. En el mismo espacio se inventarían en 1686 y 1701. Tras el incendio de 1734 el cuadro pasó al Palacio Real nuevo hasta su traslado al Prado.